jueves, 10 de enero de 2013

Invitado: David B. Bustos


Toda “Ella” piensa

Toda “Ella” piensa
que la aparté de mi vida
igual que se apartan las cosas
que ya no importan.

Toda “Ella” piensa
que la dejé en la cuneta
de todos los Soles de mi vida.

Toda “Ella” me piensa
inútil y frágil,
demasiado tendente
al desasosiego.

Y no me importa
cómo me piense toda “Ella”,
pero sí me concierne
aquella manera 
en que yo la pienso.

Yo la pienso
en el devenir de las cosas rotas;
Yo la pienso en la esquina fracturada
de cualquier instante
del día.
(por muy jodido que esté).

Yo la pienso en la balanza
de las cosas que pesan
y en el grano endeble de la nada.
(Igual que pesa el infierno de no tenerla).

Yo la pienso
en todas las fotografías
de mi casa.

Yo la pienso
en el territorio desértico y cruel
de los abandonados.

Yo la pienso
en mis sueños
y en mis delirios;
En mis pesadillas
y en mi fiebre.

Yo la pienso.

Y ella no sabe 
que la pienso...

Yo la pienso en su casa
a solas o acompañada;
leyendo un libro con calma,
o preparando la cena por mí
pero sin mí.

Yo la pienso,
y decididamente,
creo que no hay crueldad
en su boca ni en sus labios
rotos.

Yo la pienso,
luego existe...

Yo la pienso
entre la crueldad de mis dientes rotos;
Y la escupo, como si los años
no tuviesen nada que ver con nosotros...

Yo la pienso
mientras me muero 
por dentro...

Yo la pienso
desde el anonimato.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario