Así que aquí estamos, torturados por nuestras emociones, pero al mismo tiempo las estamos invitando. Como que nos gustan un poco: sentimos que las necesitamos. Y eso a veces se llama engaño (falsa ilusión, ignorancia), o en términos budistas, avidjya, ma-rigpa.
reflejos en juego
sábado, 5 de octubre de 2024
Invitado: Dzogchen Ponlop Rinpoché
Así que aquí estamos, torturados por nuestras emociones, pero al mismo tiempo las estamos invitando. Como que nos gustan un poco: sentimos que las necesitamos. Y eso a veces se llama engaño (falsa ilusión, ignorancia), o en términos budistas, avidjya, ma-rigpa.
viernes, 4 de octubre de 2024
Otoño 11, en casa
En la radio, en El Coleccionista, suena Vivaldi, con su otoño, claro. Yo estoy en casa. Hace 4 años aún estaba del otro lado del mar, preparándome para volver, como consta aquí. Entonces me despedía de Barcelona. Hoy siento cómo el otoño de este lado del mar trae cambios más profundos en su aparente sutileza, comparado con los otoños más al norte.
La luz cae de otra manera: me deslumbra cuando trabajo de mañana en el comedor de mi casa, junto al balcón. El frescor, a veces casi frío, se une al aire y se cuela. A veces es demasiado tarde para cubrirnos. A veces, no. Hay más nubes y menos sol. Las flores amarillas empiezan a asomarse entre el pasto, en los terrenos baldíos, en las grietas de la banqueta, pero necesitan que la humedad ceda un poco más.
Se siente la presencia de los muertos acercándose. Quizá de ahí la nostalgia, mi nostalgia. Anochece mucho antes: a las 7 de la tarde ya está oscuro y no me dan ganas de dejar la casa. Ya no salgo a caminar a esa hora. Una cruz fresca de pericón resguarda la puerta de entrada a mi casa y otra preside el cofre del Antuanito: protecciones desconocidas en Madrid o Barcelona.
Sigue el otoño de Vivaldi en la radio: lento de pronto y ahora otra vez rápido, como aprovechando la energía que ha quedado del verano, antes de dar paso al frío. Recuerdo otra vez cuando fui copo de nieve en una puesta en escena de las estaciones en el Polyforum Cultural Siqueiros en la Ciudad de México, con el grupo de baile al que pertenecí dos segundos en la primaria.
Y hoy duelen un poco más las ausencias, las físicas y las emocionales, quienes han muerto y quienes solo se distanciaron o voltearon hacia otro lado. Y anuncia Ismael: Este fue El otoño, concierto en Fa mayor, de Las cuatro estaciones, RV 293 con Alison Bury y la Academia de Música Antigua.
luz otoñal en mi estudio |
lunes, 30 de septiembre de 2024
Pequeño diálogo filosófico-existencial
foto de J |
sábado, 28 de septiembre de 2024
Invitado: Ringu Tulku
viernes, 27 de septiembre de 2024
Día de listas
Del germ. *lîsta; cf. a. al. ant. y nórd. lîsta, ingl. list 'franja', 'orillo'.
3. f. Enumeración, generalmente en forma de columna, de personas, cosas, cantidades, etc., que se hace con determinado propósito.
Sin.: |
|
En el grupo de práctica de escritura de Salto Nuevo, casi siempre arrancamos haciendo una o dos listas para entrar en calor. El lunes pasado, todos los textos, 3 en total, tomaron la forma de listas.
otoño: cruces de San Miguel, elotadas, hojas rojas o doradas en el Norte, ráfagas de aire frío, final de las lluvias, los muertos, cambio en la luz, atardeceres más tempranos, cambio de hora en algunos países, calabazas, halloween, ropa de entretiempo, bebidas especiales en Starbucks, cosechas y festivales de cosechas, gripa a veces, Feria de Tlaltenango, equinoccio, Vivaldi, Ramón del Valle Inclán, manzanas, mandarinas, zapote negro, cempasúchiles, pericón, flor de calabaza, suéteres ligeros (o no tan ligeros), agentes de tránsito en la feria, flores silvestres amarillas, estornudos, desafío para el cuerpo según la medicina china, cumpleaños de Yare y de María Loherr y de doña Frida, cumpleaños de Pilar, lunas brillantísimas en octubre, atardeceres espectaculares
lo que puedes aceptar sin juicio: ese ruidito extraño de fondo como si alguien tecleara en un teléfono, la migraña que tuve en la mañana y el apendejamiento por zomig, los ladridos casi aullidos del perro del vecino, los maullidos de los gatitos bebés, ser oficialmente vieja con mi credencial nueva del inapam, que ya no se llame insen, los eufemismos que alguna gente necesita para sobrevivir, no ser monedita de oro, que J celebre con B el cumpleaños de M, que mi mamá no me quisiera como yo necesitaba, que no me tocara con David en el grupo de lectura de esta mañana, que mi novela me parezca buena, que mi novela me parezca una mierda, a Ursula K. Leguin, a ET con todo y que no cumplió su palabra, a S y sus quejas, a E y su victimez (victimismo dice el diccionario), a M y su torpeza, que no tenga el dinero (aún) para ir a una peregrinación a La India, perder en continental
qué hay en mi baño: una sirena de esas hechas con cáscara de coco que parece embarazada, la cruz de cerámica blanca con hojitas pintadas a mano de la primera comunión de I (hija de J), una toalla para las manos, una toalla para después del baño, un morral huichol que me trajeron por encargo hace mil años G y G (donde tengo pasta de dientes de repuesto, hilo dental de repuesto, crema para labios de repuesto, unos clips cubiertos de plástico que uso para meter aretes o cadenas de plata en la solución apestosa que los limpia, un peine de plástico negro, un peine de metal plateado que uso para desenredar los flecos de blusas o rebozos), sobre el excusado: mi crema para el cuerpo, mi desodorante sólido y mi desodorante líquido de alumbre, el contenedor de papel de baño húmedo con papel de baño húmedo, un desodorante en crema que me regaló Frida mamá una navidad
viernes, 20 de septiembre de 2024
Invitado: Yongey Mingyur Rinpoché
jueves, 19 de septiembre de 2024
Invitada: Jetsunma Tenzin Palmo
No es cuánto hayamos donado al templo, en cuántos retiros nos hayamos sentado, o durante cuánto tiempo practiquemos la meditación cada día, sino si nuestros corazones se están volviendo naturalmente más gentiles. ¿Pensamos espontáneamente más en los demás que en nosotros mismos? Cuando surgen el enojo o la codicia, ¿los reconocemos? ¿Somos capaces de soltar? ¿Estamos cultivando mentes que no se aferran? Estas son las preguntas que necesitamos hacernos para saber si estamos verdaderamente en el camino correcto o no.
enfoques y desenfoques en Chimal |
miércoles, 18 de septiembre de 2024
sueño 35.
martes, 17 de septiembre de 2024
sueño 34.
lunes, 16 de septiembre de 2024
Invitado: Khenpo Tsültrim Gyamtso Rinpoché
La forma de trascender la esperanza y el miedo
La forma de trascender la esperanza y el miedo no es intentar evitar que surjan. En cambio, la forma de trascender la esperanza y el miedo es meditar en la verdadera naturaleza de la esperanza y el miedo.
Las instrucciones del primer giro de la rueda del dharma* son cerrar las percepciones sensoriales mientras uno medita. La razón para esto es que si uno se aferra a las apariencias externas como si fueran verdaderamente existentes, cuando uno percibe esas apariencia, surgen el apego y la aversión.
Sin embargo, la visión de la Prajnaparamita del segundo giro de la rueda del dharma es que las apariencias externas son como sueños. Cuando sabes esto, no tienes que evitar que las apariencias se manifiesten ante tus conciencias sensoriales. Cuando eres capaz de cultivar la conciencia de la naturaleza ilusoria, parecida a un sueño, de las apariencias, eso se llama el "samadhi parecido a una ilusión". Meditar en este samadhi es importante.
Cuando seguimos el camino del razonamiento, usamos nuestra inteligencia para examinar críticamente lo que nuestros maestros nos explican. Resolvemos nuestras dudas sobre sus enseñanzas analizando nuestras propias experiencias de vida para ver si las enseñanzas son válidas y nos dan perspectivas útiles. Si podemos ganar certeza en la precisión y el beneficio de las enseñanzas, meditamos para convertir esa certeza en experiencia de la naturaleza verdadera de la realidad.
Esto tiene efectos positivos: deberías investigar por tu cuenta y ver. Entonces tendrás una fe que proviene de tu propia inteligencia y diligencia, más que de un mandato externo. No será fe en una persona o doctrina externas; será fe en tu propia naturaleza verdadera: fe que es inseparable de la verdadera naturaleza de tu mente.
sábado, 14 de septiembre de 2024
Invitado: Dzogchen Ponlop Rinpoché
Escribí este poema mientras contemplaba la mente del pasado, presente y futuro:
Una nota para mis pensamientos
El futuro, ¿no es solo una proyección de la mente?
¿No están todos simplemente sucediendo ahora?
Lo que hay, es solo este momento:
¡Tan fresco y tan solo otro ahora fugaz!
El mundo que ves,
Y los sonidos que escuchas,
Pensamientos que surgen al azar,
¿No están todos simplemente sucediendo en el ahora?
¿Por qué no simplemente sueltas los pensamientos del pasado y futuro?
¿Por qué no puedes simplemente relajarte en este hermoso mundo ahora?
¿Por qué sacrificas tu presente por tus meras imaginaciones?
¡Hey! ¡Hey! Despierta, tú, perezoso lama dzogchen!
viernes, 13 de septiembre de 2024
sueño 33.
Sueño contigo una vez más. Dejamos de ser amigas hace unos 12 años, pero en sueños seguimos siéndolo. Vamos a comer chiles en nogada (sospecho que no son un platillo que en vigilia te guste, pero quién sabe). Hay algo de caos, tus nietos, mucha gente organizándose para subirnos en los coches, en tu coche. Ruido, pues. Inteferencia. Pero reconecto con ese cariño que nos tuvimos. Y aún soñando pienso en que voy a escribir sobre el encuentro, en que no está sucediendo en realidad, en que me gustaría que sucediera. Es el mes de tu cumpleaños. Bruno, con quien me recomendaste, está atento para que nuestras citas con él no coincidan. Las próximas, en octubre, estarán separadas por un distancia prudencial de media hora. Algo has de haberle contado porque yo nunca nos mencioné. En una semana y un día cumplirás 78 años y nunca celebraremos nuestros cumpleaños juntas otra vez. Pero queda mi piedra que sigue floreciendo y sorprendiéndome, como ayer al volver del consultorio. Y cuando paseo de mañana, las golondrinas vuelan, muchas, casi a ras de mi cabeza, mientras otras se posan en los cables a recibir el sol de la mañana, entre gotas de lluvia.
martes, 10 de septiembre de 2024
S e p t i e m b r e
domingo, 8 de septiembre de 2024
Amistad 26 o
jueves, 5 de septiembre de 2024
Invitada: Jetsunma Tenzin Palmo
La naturaleza de la mente es espaciosidad vacía total: está llena, pero está llena de cosas como sabiduría, compasión y pureza, y una conciencia no dual clara. No dual significa que no hay distinción entre sujeto y objeto. Esta cualidad de la mente no es accesible al pensamiento o concepto. Todas las tradiciones religiosas coinciden en ello. Está más allá de las palabras, más allá del pensamiento; es cuando el principio del pensamiento se cae. Pero también es directamente conocible: podemos alcanzar la realización de esta cualidad. La meta del camino espiritual es acceder a esta cualidad, a este nivel más alto de conciencia que todos poseemos y que es la base misma de nuestro ser. Esa es nuestra cordura básica.
a cielo abierto: paseando en Chimal |
Original en inglés, aquí. Traducción al español e imagen, mías.