bazar.
Toma 1. Diciembre 1983.
Él: Anda... Deja que te compre algo. Un collar. Por favor.
Ella: No. No insistas. Por favor.
Él no insiste.
Ella cree sentirse aliviada.
Ella lo abandona.
Él no vuelve a hablar de ella, con nadie, nunca.
Toma 2. Agosto 2014.
Él: Hoy sí. El regalo pendiente. ¿Qué quieres?
Ella: No sé. Elijamos juntos. Hoy sí.
Ella escoge unos aretes (pendientes les dice él). Se los prueba y se los muestra. Él le hace un retrato. Los compra. Ambos creen que así exorcizan el pasado, el desamor, los fantasmas. Little did they know.
(También le compra unos a su hermana, que lo espera en casa. "Se los daré por Navidad", explica.)
Toma 3. Hoy.
Él la abandonó. No vuelve a hablar de ella, con nadie, nunca.
Ella aprende a no quererlo. Le cuesta. Paso a paso. Ya casi no llora.
Los aretes viven junto a otros en un librero en su alcoba. Quizá los vuelva a usar. Quizá no.
Ella exorciza el pasado, el desamor, los fantasmas. Se reconoce en soledad. Empieza a vivir otra vez. Qué largo ha sido. If only she had known.
Cuando sabemos en verdad que cada final implica también una renovación, empezamos a relajarnos. Nuestras mentes se abren al proceso de cambio. Sentimos que podemos tocar de hecho la realidad y no tememos a la muerte.
—Dzogchen Ponlop Rinpoché
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